El logro político más destacado de Gissela Palacios Mosquera, en el Chocó.

Gissela Palacios Mosquera, actualmente desempeñando el rol de gestora social del Chocó o primera dama, es descrita por muchos como una persona de carácter firme, alguien que no se deja intimidar por nadie y que, cuando se trata de defenderse, lo hace con decisión.

Su reputación la ha convertido en una figura destacada en el ámbito local, regional, nacional e internacional durante los últimos 4 años de la administración de su esposo, Ariel Palacios Calderón, como gobernador del Chocó. La Oficina de la Gestora Social, bajo su liderazgo, ha alcanzado un estatus de prestigio y ha sido reconocida como una de las cinco mejores del país por la primera dama de Colombia, lo cual es digno de elogio.

Es admirable cómo Gissela Palacios Mosquera ha respaldado a su esposo, el gobernador Ariel Palacios Calderón, en sus decisiones y acciones, siendo aliados tanto en el amor como en la toma de buenas decisiones en beneficio de las familias chocoanas. Su influencia en la toma de decisiones políticas de su esposo es evidente, y su opinión se valora en gran medida. Escucharla ha demostrado ser efectivo en la mayoría de las ocasiones, lo que resalta su importancia y liderazgo.

Si bien es cierto, Gissela Palacios Mosquera, ha cumplido un rol importante en lo social y sus acciones hablan por sí solas, pero también es importante resaltar su rol en el ámbito político del Chocó, donde ha desempeñado un papel significativo al contribuir estratégicamente a la elección de su esposo como gobernador. Su habilidad para mover las piezas en el ajedrez político permitió que Ariel Palacios Calderón, fuera elegido como el candidato del Partido Liberal para la Gobernación del Chocó, y finalmente triunfara en las elecciones generales. Su papel estratégico en este proceso fue heroico y demostró su destreza en el ámbito político del departamento, a pesar de que algunos la subestimen debido a su rol como gestora social.

Sin embargo, debido a su firme defensa del buen nombre y los principios de su esposo, Gissela Palacios Mosquera, también ha generado ciertas tensiones en el ámbito político. Sus posturas y decisiones en las elecciones de Congreso de la República crearon discordia en el Partido Liberal, lo que se reflejó en la ruptura de relaciones políticas. A pesar de las dificultades y desafíos, Gissela ha demostrado su lealtad y determinación. Para Gissela Palacios Mosquera, cada acción política era importante, ya que buscaba demostrar su carácter y determinación.

Su esfuerzo contribuyó significativamente a que su esposo regresara al cargo de gobernador del Chocó, incluso después de enfrentar un período de detención domiciliaria debido a acusaciones relacionadas con irregularidades en contratos para combatir el COVID-19 en la región. Finalmente, tras 259 días de esfuerzos jurídicos, el Tribunal Superior de Bogotá otorgó la libertad a Ariel Palacios, con un papel esencial desempeñado por su esposa Gissela Palacios Mosquera y otros colaboradores.

Sin embargo, mientras Ariel Palacios Calderón luchaba por su regreso al cargo, el Directorio Departamental Liberal Cordobista se enfrentaba a la competencia por la selección del candidato o candidata a la Gobernación del Chocó por parte de esa colectividad para el período 2024-2027. En este proceso, cinco precandidatos se presentaron: Gissela, respaldaban a Nubia Carolina Córdoba Curi como su candidata. Jhonany Carlos Alberto Palacios Mosquera abogaba por Marinela Palomeque Serna como su candidata. Nilton Córdoba Manyoma inscribió a su compañera de vida, Sandra Maturana, pero expresó su apoyo a Nubia Carolina Córdoba Curi. Además, otros candidatos inscritos aparentemente sin posibilidades eran Yosimar Mosquera protegido de Domingo, e Iber Antonio Lopez Ibarguen.

Este conflicto generó divisiones en el seno del Partido Liberal, atrayendo la atención constante de los medios de comunicación. Mientras tanto, las demás campañas políticas se mantenían en espera, pendientes de la decisión que tomaría el Partido Liberal en el Chocó.

El 28 de abril de 2023, Ariel Palacios Calderón, regresó a su puesto como gobernador del Chocó, lo que arrojó más luz sobre la intención de Nubia Carolina Córdoba Curi de ser seleccionada por el partido, ya que Gissela, reafirmava que ella era su candidata para representar al Partido Liberal en las elecciones.

Después de idas y venidas, consultas y disputas sobre quién tenía la autoridad para decidir el candidato de esta colectividad, el Directorio Departamental finalmente optó por Nubia Carolina Córdoba Curi, como su candidata, al tiempo que comunicaron esta decisión al Directorio Nacional. Sin embargo, persistían las dudas acerca de quién tenía la responsabilidad de elegir al candidato, ya fuera Domingo, el colegiado, el Directorio Departamental o el Directorio Nacional. Justo cuando parecía que la candidata sería Marinela Palomeque Serna, el Directorio Nacional confirmó la decisión del Directorio Departamental, ratificando que la candidata sería Nubia Carolina Córdoba Curi. Digamos que esta fue una de las grandes batallas al interior del trapo rojo en el Departamento del Chocó.

La elección de Nubia Carolina Córdoba Curi como candidata a la Gobernación del Chocó, convirtiéndola en la primera mujer gobernadora por elección popular con 100.096 votos, sigue siendo percibida como una protegida de Gissela Palacios Mosquera. Dadas las marcadas divisiones internas en el Partido Liberal, algunos sectores consideraban que el camino de Nubia hacia el Palacio de la Confianza sería complicado.

Su tía, conocida como “la Nena,” quien era candidata a la Alcaldía de Quibdó, con el aval del Partido Liberal, inicialmente se pensó que respaldaría a su sobrina. Sin embargo, aprovechando que también tenía el respaldo del Partido de la U, decidió establecer una alianza estratégica con Patrocinio Sánchez Montes de Oca. La estrategia planteaba que Patrocinio aportaría los votos que obtuvo en Quibdó, un total de 23,341, para que “la Nena” ganara la Alcaldía, y a cambio, ella aportaría votos a Patrocinio para llegar a la Gobernación del Chocó.

Sin embargo, los resultados finales no respaldaron esta estrategia. “La Nena” obtuvo 13,265 votos, siendo derrotada por Rafael Bolaños – Teddy, quien no estaba entre los pronósticos y logró 15,451 votos. En este contexto, parece que la gestora social del Chocó, Gissela Palacios Mosquera, fue la que mejor jugó sus cartas. Logró unir a los candidatos a la Alcaldía de Quibdó, como Harold Mosquera, Cesar García, Darwin Lozano, y al ganador Rafael Bolaños – Teddy en apoyo a la campaña de Nubia Carolina Córdoba Curi, consiguiendo un total de 22,499 votos en la capital del Departamento en favor de Nubia. La pregunta que se plantea, es ¿quién manejó mejor la situación?

Podemos afirmar, por lo tanto, que la principal beneficiaria de esta competencia electoral es Gissela Palacios Mosquera, la gestora social del Chocó. En todas las perspectivas, sostiene la Gobernación del Chocó y logró la victoria en la Alcaldía de Quibdó junto a Rafael Bolaños – Teddy. No tenemos información precisa sobre lo que ocurrió, pero lo que es evidente es que Johanny Carlos Alberto Palacios Mosquera, conocido como “Domingo,” trabajó incansablemente para asegurar la elección de Nubia Carolina Córdoba Curi como gobernadora del Chocó, al igual que Niltón Córdoba Manyoma, pero este mismo esfuerzo no se tradujo en un éxito similar en la campaña de “la Nena” para la Alcaldía de Quibdó. Esto es lo que consideramos como el logro político más sobresaliente de Gissela Palacios Mosquera, en el Chocó.

En lo que respecta a Nubia Carolina Córdoba Curi y Rafael Bolaños – Teddy, ambos tienen un compromiso significativo con el bienestar del Departamento del Chocó. El pueblo que votó ha comprendido que aquí, no hay forma de gobernar con partidos diferentes a los que ya existen, pero dentro de estas agrupaciones políticas existen individuos valiosos que pueden marcar una diferencia y generar cambios en el Chocó.

Sostenemos que tanto Quibdó como el Chocó, necesitan gobiernos que trabajen de la mano y colaboren mutuamente para impulsar la transformación real de Quibdó. Es fundamental que el gobernador destine una parte sustancial de los recursos de regalías para mejorar el entorno y la calidad de vida de sus habitantes. Nubia y Teddy tienen la responsabilidad de brindarnos un Quibdó y un Chocó distintos en los próximos 4 años. Esto es su deber, ya que así lo eligió el pueblo, que optó por el cambio en lugar de continuar con lo mismo en el seno de las mismas estructuras políticas.

Mario Luis Benítez Arboleda
Comunicador y Relacionista Público
Administrador Público Territorial
Especialista en Seguridad Social y Proyecto en Salud
Magister en formación en Políticas de Desarrollo